Carlos Serrano de Osma (Madrid, January 16, 1916-Alicante, July 26, 1984) was a Spanish film and television critic, director and screenwriter.

A film critic in Spain in the 1930s, he ventured into directing in the midst of the Spanish post-war period, 1947, with three films that represented a break with the Spanish cinema of the time: Abel Sánchez, based on the novel by Miguel de Unamuno, with novel forms in both narrative and framing; La sirena negra, based on the novel of the same name by the writer Emilia Pardo Bazán and considered by some critics his best work, and, in 1948, Embrujo, with his own script and the presence on stage of Manolo Caracol and Lola Flores, with a clear surrealist content that was definitely "a challenge to the mentality of producers and censors", even for the public, and whose value was not recognized until it was awarded thirty-four years later, at the Seville Film Festival in 1982. Serrano de Osma continued directing films until the 1960s, -La rosa roja was his last film-, but he gave up, as he said, "because I couldn't find any stimulus for it and I became discouraged". He continued in the world of cinema as a scriptwriter, with incursions also in television; he was a professor at the Film School in Madrid and also in Rome.

Carlos Serrano de Osma (Madrid, 16 de enero de 1916-Alicante, 26 de julio de 1984) fue un crítico, director y guionista de cine y televisión español.

Crítico de cine en la España de los años 1930, se aventuró en la dirección en plena posguerra española, 1947, con tres películas que suponían una ruptura con el cine español del momento: Abel Sánchez, sobre la base de la novela de Miguel de Unamuno, con formas novedosas tanto en la narrativa como en los encuadres; La sirena negra, basada en la novela homónima de la escritora Emilia Pardo Bazán y considerada por algunos críticos su mejor obra, y, en 1948, Embrujo, con guion propio y la presencia en escena de Manolo Caracol y Lola Flores, de claro contenido surrealista que resultó definitivamente «un reto a la mentalidad de productores y censores», incluso para el público, y cuyo valor no fue reconocido hasta ser premiada treinta y cuatro años después, en el Festival de Cine de Sevilla en 1982. Serrano de Osma siguió dirigiendo cine hasta los años 1960, —La rosa roja fue su última película—, pero abandonó, según señaló, «porque no encontraba estímulos para ello y me fue cundiendo el desánimo». Siguió en el mundo del cine como guionista, con incursiones también en televisión; fue profesor de la Escuela de Cine en Madrid y también en Roma.