Un gobernador corrupto se muestra como un eficiente servidor público durante el día, pero por la noche es el jefe de una violenta y criminal banda de mercenarios. Debido a los hechos de violencia, tres detectives y policías de la unidad especial Kiloa Infante, Gutiérrez y Bravo son enviados desde la capital del país para resolver la situación. Rápidamente, los investigadores sospechan quién es el responsable del problema y el gobernador inicia un contraataque sangriento que incluye matar a Alexa, quien resulta ser el interés amoroso de Kiloa. Pronto tanto policías como delincuentes se enfrentan poniendo a prueba cómo acaba una vida entre el poder y la corrupción.