Con el propósito de salvar el planeta, Liam y Darius trabajan en la invención de una pieza de tecnología teóricamente imposible de elaborar.

Darius debe acelerar su trabajo en el EmDrive. Grace no da crédito al enterarse que el mejor plan del Pentágono supondría millones de muertes.

Darius es detenido bajo sospecha de haber hackeado la red de la NASA. Grace acude a la compañía de Tanz para seguir investigando, después de haberle interrogado.

Darius y Grace descubren quién es el topo. Se hace evidente que una potencia extranjera está intentando hacerse con el control del asteroide.

A medida que la situación se agrava, Harris y Liam emprenden una misión para extraer un cristal que servirá para construir un nuevo EmDrive.

Las tensiones cada vez mayores con los rusos adquieren todo el protagonismo y ciertos intereses nacionales amenazan con empañar la verdadera situación.

Grace y Darius, de visita en Rusia, se dan cuenta de que las aguas que navegan son más turbias de lo que ellos pensaban.

Las relaciones diplomáticas entre Estados Unidos y Rusia se complican debido a una filtración de información, lo que pone en peligro el plan para proteger el planeta.

Darius, que no consigue hablar con la presidenta, decide hacer un anuncio en una rueda de prensa para que sea ella quien le contacte.

Harris y Grace están preocupados por la seguridad de sus hijos, ahora que el presidente en funciones ha declarado grupo terrorista a los piratas informáticos.

Harris, Grace y Darius inician su propia investigación sobre una conspiración en la que están involucradas las altas esferas del Gobierno.

Un buque de la marina estadounidense es atacado junto a la costa de Florida. Grace, Harris, Liam y Darius actúan rápidamente para evitar la destrucción de la humanidad.